La tardanza en aprobarse el Real Decreto que la regula retrasa la implantación en la mayoría de municipios obligados
La Zona de Bajas Emisiones de Talavera entrará en vigor a finales de 2023
El concejal de Contrataciones y Seguimiento de Concesiones, Luis Enrique Hidalgo, ha informado este jueves de que la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Talavera de la Reina no entrará en vigor hasta finales de 2023.
La Ciudad de la Cerámica, como la mayoría de municipios obligados a acotar una zona de circulación de vehículos restringida en función de lo que contaminen, no ha cumplido con el plazo del 1 de enero de 2023 para tenerla en funcionamiento.
Y es que sólo 20 de los 149 ayuntamientos obligados a tener una ZBE por tener más de 50.000 habitantes, es decir el 13%, han cumplido con esa fecha que marca la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, aprobada en mayo de 2021, aunque en enero de 2020 ya se contemplaba en la Declaración ante la Emergencia Climática y Ambiental en España.
El principal motivo para incumplir esa fecha ha sido la tardanza en la publicación del Real Decreto de Zonas de Bajas Emisiones, aprobado en el Consejo de Ministros del pasado 27 de diciembre y que entró en vigor un día después.
A través de la Federación Española de Municipios y Provincias se solicitó a finales de octubre de 2022 una moratoria para la entrada en vigor de las ZBE, arguyendo que sin ese RD no se podrían aprobar nuevas ordenanzas de forma definitiva, con el reglamento, las obligaciones y las sanciones correspondientes, y habría que rehacerlas de nuevo cuando se conocieran los pormenores de la normativa.
Ya hay empresa adjudicataria
El Ayuntamiento de Talavera lleva trabajando en la implantación de su Zona de Bajas Emisiones desde que tuvo conocimiento del imperativo de la Unión Europea y antes de esa ley del Cambio Climático.
La Junta de Gobierno Local celebrada este jueves ha tomado conocimiento de la clasificación de la propuesta de adjudicación de la empresa UTE Techmotek, la oferta mejor valorada en el concurso al que han concurrido once firmas, y que será la que ejecute la puesta en funcionamiento de la ZBE de Talavera “si el procedimiento acaba en buen fin”.
En este punto, Hidalgo ha señalado que “la empresa aún tiene que presentar una serie de documentación que avale la oferta que ha presentado y, a partir de ahí, se pasaría a la adjudicación definitiva y a la firma del contrato, comenzando entonces el plazo de ejecución, que es de unos 10 meses”.
El proyecto
Con un presupuesto de 1.358.344,48 euros (IVA incluido), la Zona de Bajas Emisiones de Talavera se va a establecer en el Casco Histórico abarcando un total de 0,625 kilómetros cuadrados, incluyendo la calle Trinidad.
El proyecto contempla la instalación de 23 cámaras para el control de acceso a la zona perimetrada para lectura de matrículas; la instalación de 11 paneles informativos que den cuenta a tiempo real del estado del tráfico e incidencias; información sobre el número de plazas de aparcamiento disponibles en la ZBE; así como también la señalización horizontal y vertical correspondiente, el sistema informático que la regulará y 5 estaciones con sensores de edición de la calidad del aire en toda la ciudad.
También se pondrá en marcha un portal web en el que la ciudadanía podrá realizar gestiones de autorizaciones de vehículos que necesiten entrar en la zona delimitada como pueden ser coche de emergencia o residentes y excepciones como la solicitud de un vehículo sin distintivo que necesite entrar en la zona de manera puntual.
En Talavera hay en la actualidad 53.000 vehículos de los cuales el 33 % no tiene el distintivo medioambiental (B, C, 0 ó ECO), aunque para 2030 el equipo de Gobierno ha estimado que con las ayudas a la renovación de vehículos no contaminantes la implantación de la ZBE no supondrá un problema ni económico ni de acceso.
El objetivo de la Zona de Bajas Emisiones es contribuir a la mejora del aire medioambiental, contribuir al cambio climático reduciendo la emisión de CO2 promoviendo un cambio así en el trasporte más sostenible, reducir el tráfico y fomentar la eficiencia energética, entre otros.
La nueva ordenanza será consensuada
Luis Enrique Hidalgo también ha informado de que el equipo de Gobierno ya se está trabajando en la futura ordenanza que regulará esta Zona de Bajas Emisiones.
Una ordenanza que será consensuada, apuntando que a partir del mes de febrero “comenzaremos a hacer una serie de consultas a asociaciones de vecinos, comerciales, empresariales y agentes sociales para tener en cuenta las necesidades de estos colectivos”.
El edil ha indicado que “hay que buscar un equilibrio sin incumplir la normativa”, remarcando que “en ningún caso habrá una prohibición total y absoluta del paso de vehículos rodados a esta zona” y que “habrá excepciones y éstas son las que vamos a regular entre todos”.
Los vehículos de residentes sin distintivos ambiental, los de los negocios, la carga y descarga son algunos de los asuntos pendientes de perfilar.
Por último, Hidalgo ha destacado que esta ZBE será “muy beneficiosa para mejorar el aire de la ciudad sin perjudicar la actividad económica o el día a día de los vecinos”.
Plan de Mobvilidad Urbana Sostenible
Esta Zona de Bajas Emisiones está englobada en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible, que para ejecutarlo el Ayuntamiento de Talavera cuenta con 2,4 millones de euros, otorgados por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), en el marco del Componente 1 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).
Este montante económico, como especificó el Mitma en mayo de 2022, se destinará a la puesta en marcha de la porpia ZBE, y para los nuevos itinerarios ciclistas (824.571,00 euros), y para la adecuación itinerarios peatonales (377.010,00 euros), proyectos recientemente adjudicados.
Para el PP, “una chapuza”
Este jueves el concejal del Grupo Municipal Popular Javier Muñoz-Gallego tildaba de “chapuza” del Gobierno la implantación de la Zona de Bajas Emisiones.
El edil ha recordado que llevan meses avisando de que la entrada en vigor era el 1 de enero de 2023, criticando de paso la tardanza en la aprobación del Real Decreto y que se quiera iniciar el próximo mes las consultas con los talaveranos, “llegan tarde y mal”.
Asimismo ha lamentado que la ciudadanía apenas tenga información de esa ZBE (horarios, aparcamientos disuasorios, tasas a vecinos residentes, etc.) ni de su régimen sancionador, “que debe tener cabida en las ordenanzas fiscales”.
Para Muñoz-Gallego este asunto “es sólo un ejemplo más de la pésima gestión” que está llevando a cabo el Gobierno, con “opacidad” y “sin planificación”.
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