Por la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales con motivo del 25N
Mujeres hartas: la violencia machista exige posicionamiento claro
Redacción Ahora CLM 
La Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales, FADEMUR, de Castilla-La Mancha no reprime el enfado de muchísimas mujeres rurales que ven cómo la violencia contra las mujeres sigue afectándoles de manera directa y condicionando su día a día. “El día 25N debería ser un día para concienciarnos, denunciar las situaciones, recordar a las mujeres asesinadas que ya no están con nosotras; pero a veces dan ganas de mostrar un enfado mayor, porque estamos hablando de mujeres asesinadas y los gestos se nos quedan cortos. Estamos hartas”, así de rotundas se muestran desde Fademur Castilla-La Mancha.
“Estamos hartas de los negacionistas, de los que se definen como democráticos y patriotas, y no reconocen la violencia contra las mujeres”. Un hartazgo que estalla en la celebración de este 25N al ver cómo se malgastan fondos públicos del Pacto de Estado contra la Violencia de Género en obsequios a los vecinos, o talleres de peluquería o costura; sin ir más lejos, en pueblos de Castilla-La Mancha. Son muchos los mecanismos de sensibilización, “deberían estar controladas por el Ministerio para que no se dé el caso de talleres de corte y confección, peluquería o manualidades para justificar presupuestos y sin hacer mención a la violencia machista”.
Sorprende a Fademur los efectos colaterales en toda España, y en municipios de Castilla-La Mancha como Ciudad Real, Tomelloso, Talavera de la Reina, La Solana, Quintanar del Rey, entre otros: Se desmarcan de la conmemoración del 25N, una fecha que recuerda a mujeres asesinadas a manos de hombres. Las decisiones tienen efectos directos en la vida de las mujeres. “Estamos hartas de ver municipios donde se elimina la Unidad de Violencia de Género de la Policía Local para llamarse Unidad de Protección y Apoyo Judicial. Hartas de que eliminen el minuto de silencio en recuerdo de las víctimas; hartas de declaraciones que victimizan a las propias mujeres. Hartas que de que nos eliminen de un cartel”. Fademur denuncia que el silencio y hacer a las mujeres invisibles es otra lacra que alimenta la violencia machista.
Fademur lleva años luchando contra la violencia machista con numerosas acciones y actividades; sensibilización con jóvenes a través de la digitalización, programas con grupos de desarrollo rural o con ayuntamientos o diputaciones dentro del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, campañas de educación y formación en comunidades rurales para reconocer y prevenir la violencia contra las mujeres. Un trabajo diario que deriva en hartazgo y enfado al ver cómo se suprimen puntos violetas, unidades de violencia de género, minutos de silencio, pancartas en balcones institucionales, entre otras tantas acciones negacionistas que atentan contra la vida de las mujeres.
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