El 26 de octubre disputará la cita más importante del triatlón de larga distancia
El galveño Javier Corroto, del bronce en el Iroman de Lanzarote al sueño de Hawái
EFE - AhoraCLM 
26 de octubre. Esa es la fecha marcada en rojo en el calendario Javier Corroto, que tras el tercer puesto en el último Ironman de Lanzarote ha logrado la clasificación para el de Hawái, que tiene vitola de Campeonato del Mundo.
Fue un ejercicio de resistencia, 9 horas, 40 minutos y 43 segundos de competición en los que nadó una hora, montó en bici más de cinco y media y cumplimnetó el maratón de postre en menos de tres horas. Su medalla en la categoría de entre 40 y 44 años, más que merecida. "Mi sensación aún es que no me lo creo, no me lo esperaba, y tengo margen para mejorar", ha manifestado a EFE.
Javier Corroto Barroso (Gálvez, 1981) está en pleno proceso de preparación para ese Ironman de Hawái, en el que se enfrentará a 3,8 kilómetros de natación en mar abierto, 180 km de ciclismo y 42,2 km de carrera a pie.
El triatleta toledano no tiene entrenador y compatibiliza esta faceta deportiva con su trabajo como bombero desde 2007.
"Trabajo a turnos pero trato todos los días de hacer doble sesión de entrenamientos. Cada día hago 12.000 metros de natación y en una semana fuerte puedo llegar a los 400 kilómetros de bici y 90 corriendo. La natación la hago en piscina pero me gustaría hacerla en aguas abiertas", confiesa.
Javier Corroto vive en Cobisa, cerca de Toledo, donde trabaja. Antes del veneno del triatlón jugó siempre al fútbol hasta que se lesionó y sufrió una osteópatia de pubis. Después empezó a hacer duatlones de montañas, le dejaron una bici de montaña y ahí empezó el idilio con el triatlón.
La primera competición fue un triatlón en la Casa de Campo de Madrid en 2015. Posteriormente llegarían los Ironman. Dos en Lanzarote, uno en Italia que no pudo terminar por la picadura de una medusa y otro en Mallorca en el que se cayó con la bici.
"Mi pareja me apoya en todo, es una maravilla. Mi madre es la que más sufre con estos retos", confiesa Corroto, "feliz" por poder disfrutar de estas aventuras deportivas y compaginarlas con su profesión. "Son mi pasión".
Una referencia ha sido Iván Raña, campeón mundial de triatlón en 2002 y que participó en tres Juegos Olímpicos (Sidney 2000, Atenas 2004 y Pekín 2008). "Es con el que más he coincido. Iván es también muy anárquico y me ha metido en entrenamientos que han sido locura. 250 km en bici. La primera y única vez que lo he hecho. Y dos horas y medio corriendo sin estar preparando".
El contador de Javier Corroto está en la cuenta atrás. El objetivo es llegar en las mejores condiciones al 26 de octubre y disfrutar del Ironman de Hawái, al que acude con "la máxima ilusión".
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