Tras el abandono de Ruiz Barrientos, la formación naranja se queda por segunda legislatura consecutiva sin grupo municipal
Cs Talavera toca fondo
Rafa Berenguer 
La historia de Ciudadanos Partido de la Ciudadanía en Talavera de la Reina da para escribir un libro.
En las dos legislaturas en las que obtuvieron representación en el salón de plenos del Ayuntamiento de Talavera ninguno de sus cinco concejales logrará terminar bajo el amparo de la formación naranja.
Del transfuguismo…
En la primera, en 2015, el transfuguismo y consiguiente expulsión del partido de Jonatan Bermejo y Montaña Palacios dejaron a Ciudadanos fuera del parlamento talaverano.
La medra política y económica hizo que 3.489 electores talaveranos que habían confiado en el partido liberal que venía a regenerar las instituciones se quedaran sin representación en el salón de plenos.
Esa irrupción de Cs en la escena política de la Ciudad de la Cerámica ya había comenzado con el pie cambiado ya que su número 2 electo, el abogado Carlos Arturo Cabrera, renunció a su acta de concejal antes de la conformación de los grupos y la corporación municipal, lo que permitió entrar en ella a Montaña Palacios.
…a las renuncias
Y en la segunda legislatura en la que Ciudadanos entró a formar parte en la Corporación municipal, la de 2019, tampoco ninguno de sus tres concejales electos terminará como concejal de la formación naranja.
El inicio no pudo ser más prometedor, pues la candidatura de Susana Hernández del Mazo, talaverana de nacimiento pero oliera de adopción, logró mejorar contra todo pronóstico los resultados electorales de sus predecesores, principalmente por el bagaje que arrastraba.
Los 4.294 votos contabilizados en las urnas y los 3 concejales, le mantenían como cuarta fuerza en el parlamento cerámico, en un ‘milagro’ electoral que presagiaba estabilidad y consolidación del proyecto.
Sin embargo, su liderazgo y portavocía duró poco más de un año, al ser relegada a concejala rasa por la Coordinadora regional del partido. Teórica, íntegra y aseada parlamentaria, Hernández del Mazo no tardó en abandonar Cs y ejercer su representación como concejala no adscrita.
En su despedida de la formación naranja en Talavera, la concejala aseguró que la decisión obedecía a una "represalia a mi reiterada recriminación interna de falta de implicación y dedicación por parte del resto de concejales del Grupo Municipal Ciudadanos y otra serie de disfunciones internas, que venían impidiendo el correcto ejercicio de la actividad política municipal para la que fuimos elegidos”.
Su sucesor fue uno de los aludidos, Sergio Delgado, quien adujo entonces que “con esta renovación, Ciudadanos pretende reforzar un proyecto de ciudad acorde a lo que demanda la sociedad talaverana”.
El liderazgo de Delgado, ejercido en segundo plano desde la expulsión de Bermejo y Palacios, duró algo más, poco más, que el de Hernández del Mazo y su marcha también estuvo justificada por discrepancias, en este caso con el tercer concejal de Cs, Miguel Ángel Ruiz Barrientos.
Delgado optó por dimitir y abandonar la escena política tras renunciar a su acta de concejal, con una hoja de servicio discreta para lo anunciado y aireando las cuentas del grupo municipal.
Su marcha colocó a Ruiz Barrientos al frente de un Grupo Municipal en el que irrumpía en sustitución de Delgado la número cuatro en la candidatura del 26-M, Mónica Prieto.
El nuevo líder naranja en los dos plenos en los que ha ejercido la portavocía ha demostrado no sentirse cómodo en esa faceta y en ningún caso agotó sus tiempos en las intervenciones.
Es más, su nueva compañera en el salón de plenos posiblemente le superó en tiempo en su única intervención en un ruego y pregunta en el último Pleno del mes de mayo. Un debut que tuvo que ser reprendido por la presidencia al no ajustarse a reglamento.
La entente cordiale ha durado poco ya que Miguel Ángel Ruiz Barrientos ha abandonado Ciudadanos y está tramitando su solicitud como concejal no adscrito, es decir, seguirá la estela de la cabeza de lista en mayo de 2019.
Su decisión obedece nuevamente a injerencias desde la cúpula regional de Ciudadanos y concretamente de la líder de la formación naranja, la albaceteña Carmen Picazo, quien decidió que la nueva concejala Mónica Prieto ejerciera de portavoz del Grupo Municipal de Cs en el Ayuntamiento de Talavera.
Además, según ha manifestado Ruiz Barrientos, Picazo imponía la contratación de un familiar de Prieto para trabajar en el grupo municipal, que se sufragaría con la asignación municipal.
Así las cosas, Cs Talavera pierde por segunda legislatura consecutiva su grupo municipal y la asignación ya que con un solo concejal no puede formarse, por lo que Mónica Prieto pasará a integrar el Grupo Mixto.
Dimisión de dos juntas directivas de la Agrupación Local de Cs en Talavera
Pero las huídas, renuncias, marchas o dimisiones no sólo las han protagonizado durante estos siete años los concejales electos, sino que también han afectado a la Agrupación Local de Cs en Talavera, a sus afiliados.
Y es que tras el "lamentable" episodio de trasnfuguismo, la junta directiva que encabezaba Carlos Alberto Martín asumió "el reto de de recuperar la credibilidad de Ciudadanos Talavera" en mayo de 2017.
Un trabajo que fue 'recompensado' con el cierre de la sede de Cs en la Ciudad de la Cerámica a pocos meses de las elecciones del 26-M de 2019 y con otra injerencia, esta vez por parte del secretario regional de organización, Alejandro Ruiz, que designó a dedo como candidata a la alcaldía de Talavera a Susana Hernández del Mazo, “ex concejala por el PP en el Ayuntamiento de Olías del Rey hasta 2017”, "una compañera totalmente desconocida y desvinculada del día a día de nuestra agrupación y de la propia ciudad”.
Un movimiento que, con la 'guinda' de la candidatura del catalán Juan Carlos Girauta como cabeza de lista al Congreso de los Diputados de Ciudadanos Partido de la Ciudadanía por Toledo, provocó la dimisión en bloque de la Junta Directiva de Cs Talavera y su baja como afiliados.
Pero esta no ha sido la única dimisión en bloque de una junta directiva de la Agrupación Local de CS en Talavera. En enero de este año la que encabezaba Beatriz illescas y que aglutinaba a la comarca reeditaba estampida de la formación naranja por “el rumbo que ha tomado el partido, la falta de organización y de un proyecto de futuro a efectos de las próximas elecciones”.
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