Así evolucionó el radar de Cazalegas hasta superar las 200 multas en una mañana
Redacción Ahora CLM 
Más de 200 multas en una mañana, tres empresas privadas contratadas, siembra de señales de tráfico, movimiento de las mismas, colaciones estratégicas del radar móvil, desbroces ex profeso…, el argumento del Ayuntamiento de Cazalegas de que poner un radar en la antigua N-V no es afán recaudatorio y es por seguridad ya no se sostiene.
Todo comenzó aproximadamente hace tres años cuando recurrir a empresas privadas para implementar la seguridad vial comenzó a ponerse de moda en las entidades locales.
Desde entonces y que sepamos, hasta tres han sido contratadas por el Gobierno municipal cazalegueño –Kronnos, Eboga y Vialine- para medir la velocidad en el tramo de carretera que discurre por el polígono Soto de Cazalegas.
Con la indignación generalizada tras la publicación de un vídeo el pasado 24 de enero, se argumentó, tras primero salir al paso y no aclarar mucho la polémica en sendos comunicados, que el motivo principal era “evitar accidentes”, pero las cifras de siniestralidad de la Dirección General de Tráfico (DGT) no dicen eso, como queda constatado en sus informes de los últimos años, algo descafeinados ya que no reflejan las sanciones impuestas a lo largo del año.
La medida depara una pingüe recaudación anual, que viene reflejada en el Capítulo 3 de ingresos del proyecto de presupuesto del Ayuntamiento: en 2022, 115.000 euros.
Pero no todo ha sido de color de rosa puesto que el Ayuntamiento de Cazalegas fue denunciado por cometer varias irregularidades, como colocar el radar móvil en el guardarrail, alterando un elemento de seguridad pasiva; o colocar señales no homologadas, como trasladó públicamente el coordinador nacional de Unión Internacional para la Defensa de los Motociclistas (IMU), Juan Carlos Toribio.
Incluso, éste, llegó a dudar si el radar que se colocaba sobre ese guardarrail se hacía dentro del término municipal de Cazalegas o sobre el tramo del puente sobre el río Alberche que es de titularidad estatal.
También han sido muchos los recursos de los sancionados que han prosperado, y que prosperarán, habida cuenta de que no siempre está presente la autoridad competente mientras duran esos controles, en este caso la Policía Local de Cazalegas, porque se elude la figura de la denuncia voluntaria, como explicamos en un reportaje anterior; o que en algunos casos no figura el nombre del denunciante o número de placa del agente, por poner algunos ejemplos.
Siguiendo con la tramitación del expediente sancionador, el gobierno municipal niega que intervengan personas ajenas al consistorio, pero en notificaciones a las que ha tenido acceso AhoraCLM se delega en la empresa contratada para resolver alegaciones.
Cambio de procedimiento
Al airearse públicamente estas irregularidades, las denuncias reseñadas y aumentar, por ende, el número de recursos a expedientes sancionadores incoados, se produjeron variaciones en la práctica.
Así, y según varias fuentes del entorno municipal consultadas por este digital, se colocaron suficientes señales de aviso de control de velocidad a través de radar móvil; se cuidó que el radar no estuviera antes de las mismas como alguna vez había pasado, y por eso también se rectificaron ubicaciones de señales; y se dejaron de tomar controles de velocidad a la salida del puente Alberche dirección Madrid.
El lugar idóneo elegido para la colocación de los cinemómetros fue entonces dirección Talavera y, principalmente, en el entorno de la gasolinera, por lo que hubo que rectificar también señales de límite de velocidad y situarlas en lugares más adecuados.
Allí, y ya prescindiendo de la colocación del radar en el guardarrail, se optó en muchas ocasiones por el cartel anunciador próximo, con la cámara colgada del mismo para que los conductores no la advirtieran con facilidad, ya que dentro de un coche, como se comprobó el pasado 24 de enero, es muy ‘cantoso’, además de irregular, porque el que se hizo famoso no tenía puesto ni luces o intermitentes de emergencia ni triángulo, que hasta 2026 van a seguir siendo válidos para avisar de una detención en la vía.
Alguna vez se hizo preciso la presencia del personal municipal para desbrozar las hierbas de la cuneta por estar muy altas e impedir al radar sacar las fotografías correctamente, en este caso desde un coche.
Con todos estos ingredientes, en una mañana el velolaser, cinemómetro o radar móvil podía alcanzar las 224 fotos sancionables (como ocurrió en noviembre de 2021), aunque dicen que se ha llegado incluso a 300 fotos de coches superando el límite de velocidad, algo que uno de los trabajadores de una de las empresas contratadas llegó a calificar de “robo”.
Tal era la cantidad de notificaciones de denuncias que hasta empresarios del polígono Soto de Cazalegas trasladaron al alcalde su malestar, corrigiéndose entonces la sensibilidad del radar para que saltase con un mayor margen, por encima de los 8 kilómetros apuntan, aunque el tramo estuviera limitado a 60 km/h.
El acuerdo con la empresa para su presencia y prestación de servicio se estableció en una vez al mes, salvo excepciones, suficiente para garantizar una recaudación acorde a lo presupuestado.
Esos 115.000 euros como ingresos en el concepto de “multas por infracciones de la ordenanza de circulación”, es casi la misma cantidad que el Ayuntamiento de Cazalegas recauda por el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) y que suponen el doble y dos veces más, respectivamente, de lo que proporcionalmente presupuesta, por ejemplo, el de Talavera de la Reina en ambos conceptos.
Una recaudación extraordinaria que no redunda en la mejora de accesos y calles del polígono, que siguen siendo centro de las críticas de los usuarios, y también de los empresarios, por su abandono.
Nota: A lo largo de cuatro informaciones hemos recabado todos los datos posibles para desmenuzar y contar esta historia que ha llenado de indignación a talaveranos y comarcanos y que ha dejado al Ejecutivo local señalado.
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