En una muestra compuesta por veinticuatro creaciones
Toledo salda una deuda histórica con el escultor Alberto Sánchez al exponer su obra
La ciudad de Toledo y Castilla-La Mancha saldan desde este martes una "deuda histórica" con el escultor toledano Alberto Sánchez con una exposición permanente de su obra en una sala que lleva su nombre en la Colección Roberto Polo. Centro de Arte Moderno y Contemporáneo de Castilla-La Mancha Roberto Polo (CORPO).
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, y el mecenas Roberto Polo han inaugurado este martes el nuevo espacio expositivo denominado ‘Alberto Sánchez. Un camino que conduce a una estrella’, compuesto por 24 obras.
En este espacio se pueden contemplar nueve esculturas, en las que se encuentran 'La mujer de la estrella', 'Maternidad', 'La dama del pan de Riga' y 'Mujer castellana', así como trece dibujos entre los que están ‘La mujer sentada’, ‘Las tres figuras’ o ‘Los dos pájaros’.
También se incorpora un cartel realizado por el diseñador francés Jean Carlu (1900-1997), donado a Castilla-La Mancha por la familia Silvia Sánchez–Vincent-Paul Lorne, para la Exposición Internacional de París de 1937 y dos libros para los que Alberto Sánchez hizo la portada.
Por todo ello, la consejera de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Rosa Ana Rodríguez, ha destacado que con este espacio expositivo, la comunidad autónoma salda "una deuda histórica" con Alberto Sánchez, que nació a pocos metros donde en la actualidad se muestra su obra -en el barrio de las Covachuelas- y que a pesar de que tuvo que exiliarse de España en 1938 y murió en Moscú ,"combinó las vanguardias con su esencia y la riqueza del castellano que siempre fue".
Rodríguez ha recordado que la mayor parte de las obras que se muestran en esta sala ya se pudieron ver en el Museo de Arte Contemporáneo, que abrió en Toledo en la década de 1970 y cerró en 2001, y ha valorado que las creaciones han estado conservadas en perfecto estado en los depósitos del Museo de Santa Cruz, a cuyos directores y conservadores ha agradecido su labor.
De hecho, ha destacado que las obras que forman parte de la nueva sala del CORPO no han tenido que pasar por un proceso de restauración a pesar de que el museo de arte contemporáneo cerró hace ya más de dos décadas y, además, que algunas de estas piezas han formado parte de diversas exposiciones temporales que se han organizado en España sobre las vanguardias del siglo XX.
Asimismo, Rodríguez ha desvelado que está previsto que a finales de marzo, se inaugure una exposición temporal en el Museo de Santa Cruz con noventa obras de dicho museo de arte contemporáneo, entre las que habrá creaciones de Rafael Canogar y del propio Alberto Sánchez, dos litorafías de Joan Miró y obras de Benjamín Palencia.
En esa exposición temporal, que se mostrará al público durante unos seis meses y que recorrerá las corrientes artísticas desde finales del siglo XIX hasta la década de 1970, también estará representado el Grupo Tolmo.
Por su parte, la alcaldesa de Toledo ha celebrado que con este nuevo espacio expositivo, "la cultura rinde homenaje a un toledano referente del arte contemporáneo" en España y a nivel mundial y aunque ha afirmado que la ciudad "siempre ha tenido muy presente" a este artista y por ejemplo hay un colegio que lleva su nombre, ha reconocido que esta sala dedicada a su obra completa el reconocimiento de la ciudad hacia el artista.
Alberto Sánchez (Toledo 1895 - Moscú 1962), creador junto a Benjamín Palencia de la Escuela de Vallecas en la década de los años 20, se marchó a Moscú debido a la guerra civil española, en la que participó en las filas del ejército republicano y durante la cual se destruyó completamente su estudio de Lavapiés (Madrid) y la obra que allí tenía.
Vivió en Moscú hasta su muerte y allí están sus restos, en el cementerio Vvedénscoye.
Una de sus obras más conocidas fue la que realizó para el Pabellón de la República Española en la Feria Internacional de París (1937), una obra icónica titulada 'El pueblo español tiene un camino que conduce a una estrella', de 12,5 metros de altura, que compartió protagonismo con 'El Guernica' de Picasso.
El original de la obra desapareció, pero en la entrada del Museo Nacional Reina Sofía hay una maqueta que realizó Alberto Sánchez para la versión definitiva: esta maqueta se localizó en los sótanos del Palacio de Montjuic, en Barcelona, en 1986 junto con otras obras procedentes del Servicio de Protección del Patrimonio Artístico.
También hay otra reproducción en la plaza de Barrio Nuevo de Toledo, en plena Judería.
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