Tras la Conferencia de Presidentes que ha tenido lugar este viernes en Santander

Page urge a la reforma del modelo de financiación y no descarta pedir con retrospectiva

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El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha urgido este viernes a la reforma del modelo de financiación autonómica, pero que sea un modelo único para las autonomías del régimen común, y no ha descartado solicitar "financiación retrospectiva" para compensar la infrafinanciación de la comunidad autónoma durante los últimos diez años.

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En la rueda de prensa posterior a la Conferencia de Presidentes que se ha celebrado este viernes en Santander, el presidente castellanomanchego ha analizado el contenido de la misma, en la que ha desvelado que el Gobierno central no ha dado respuesta a sus planteamientos ni a los formulados por ningún presidente autonómico y que ha finalizado sin acuerdos.

"Evidentemente, para que haya acuerdos se tiene que trabajar previamente", ha señalado García-Page, que ha lamentado la falta de reuniones preparatorias, pero que con todo se ha mostrado convencido de que esos acuerdos pueden llegar "en las próximas reuniones".

En cuanto a la financiación autonómica, García-Page ha desgranado su propuesta para un nuevo modelo de financiación, que no incluya "modelos singulares" como por ejemplo para Cataluña, aunque ha matizado que "otra cosa son las singularidades" que ha defendido que tienen todas las autonomías.

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En este punto, ha aseverado que "la riqueza es nacional" y ha advertido de que no va a aceptar "nunca" el concepto de que la riqueza de Castilla-La Mancha "es solo de Castilla-La Mancha" o que la riqueza de Cataluña sea de Cataluña, sino que es "del conjunto de España", una concepción que para García-Page es "fronteriza".

"Si no se entiende esto, entonces cabe el caos, el caos y la materia disolvente de lo que somos incluso como país", ha advertido, al tiempo que ha opinado que "todo el mundo tiene claro que no puede haber más cupos en ningún sitio y la experiencia de los que existe pone de relieve que no puede haber más".

En cualquier caso, ha recordado que Castilla-La Mancha, Andalucía, Comunitat Valenciana y Murcia están infrafinanciadas con el actual modelo y, por tanto, ante la posibilidad de que el Gobierno condone parte de las deudas autonómicas, ha comentado que "se arregla de manera sencilla si a todas las comunidades se les aplica el mismo porcentaje de quita".

Pero ha incidido en la infrafinanciación acumulada de las cuatro autonomías citadas anteriormente, con las que a su entender se tendría que hacer "una excepción" e incluso ha advertido de que si no se aborda con urgencia el nuevo modelo de financiación, podría pedir "una financiación retrospectiva" para compensar las carencias de la última década, que ha podido derivar en un aumento de la deuda pública de estas regiones.

A su modo, si el Gobierno ofrece una quita de la deuda "justa", estarán de acuerdo todas las autonomías y ha considerado que el único beneficiario del retraso de la deuda es el Ministerio de Hacienda, ya que en la última década se han incrementado los ingresos.

Con todo, ha afirmado que no duda de la voluntad del Gobierno de abordar al financiación, sino que duda "de la autonomía del Gobierno para hacerlo" y ha añadido: "El problema es si le van a dejar".

Así, ha solicitado que el Gobierno central presente un "borrador inicial" del nuevo modelo de financiación en tres meses, con el que empezar a negociar y trabajar, en el que se incluya que "va a haber singularidades, pero en función de las necesidades de la educación, sanidad y prestaciones sociales" en función de cada autonomía, pues ha señalado que no cuesta lo mismo el servicio de atención primaria en la provincia de Cuenca -reconocida por la UE como escasamente poblada- que en otras comunidades superpobladas.

Asimismo, también ha indicado que ha presentado un decálogo en materia de vivienda "con ánimo constructivo" y, entre otros asuntos, ha planteado que la empresa pública de vivienda debe empezar un "trabajo de choque" con los terrenos que Defensa y la Tesorería General de la Seguridad Social tiene en los municipios, para que en ellos se puedan construir "miles de viviendas".

También ha apelado al PP a que ayude a desbloquear la ley del suelo, un asunto en el que a su entender este partido tiene "una asignatura pendiente", pues ha opinado que esta norma "es esencial para los ayuntamientos y las autonomías".

En cuanto a la inmigración, García-Page ha reclamado un pacto de Estado, pero ha reconocido que es difícil si lo tienen que cerrar los partidos a nivel nacional y, por ello, ha propuesto que se encargue del asunto "un pequeño grupo de presidentes autonómicos, con los ministros correspondientes", entre los que ha citado al ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, para que preparen "un borrador para un acuerdo de inmigración".

"Creo que se puede conseguir. No veo tanta distancia", ha afirmado García-Page, que ha propuesto "aprovechar que no está Vox enredando" en los gobiernos autonómicos para "cuajar un primer borrador".

Asimismo, ha afirmado que ve con buenos ojos la posición que ha planteado el presidente de Canarias sobre, al margen de los acuerdos de futuro, acordar ahora que la acumulación de migrantes se tenga que repartir lo antes posible.

Por otro lado, y ante la propuesta de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de que el Salario Mínimo Interprofesional sea distinto por comunidades, ha rechazado el planteamiento y ha advertido de que podría generar migraciones interiores entre regiones.

"El SMI es una legislación clara que es válida para todo el Estado. Discutir por eso no nos lleva a ningún sitio", ha concluido.

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