Pero expresa su esperanza de que se restauren los ecosistemas de la cuenca
La Cátedra del Tajo ve insuficiente el plan hidrológico que se ha aprobado
Redacción Ahora CLM 
La Cátedra del Tajo ha señalado este miércoles que el plan hidrológico aprobado recientemente es "insuficiente", si bien ha expresado "esperanza" en que los "elementos de incertidumbre" que se han introducido sirvan para la restauración de los ecosistemas de la cuenca.
En un comunicado, la Cátedra del Tajo ha informado de sus conclusiones ante la pregunta '¿Estamos ante un buen plan hidrológico?' y, en este sentido, ha considerado que retrasar más la implantación de caudales ecológicos completos y suficientes es "seguir perdiendo oportunidades" para la consecución de los objetivos ambientales y para alcanzar unos niveles óptimos de calidad para el uso y disfrute de las poblaciones ribereñas.
A este respecto, ha indicado que el plan hidrológico del Tajo tenía que dar respuesta al cumplimiento de la legislación de aguas y de las sentencias del Tribunal Supremo en relación a la implantación de un régimen de caudales ecológicos en todas las masas de agua de la demarcación.
Sin embargo, ha especificado que el texto aprobado supone una serie de incumplimientos en lo que respecta a la implantación de los caudales ecológicos con la postergación a 2027 de los caudales mínimos ecológicos en 19 masas de agua, o el hecho de que las masas de agua vinculadas a espacios Red Natura 2000 siguen sin tener establecidas las necesidades hídricas adicionales para la conservación de los hábitats y especies presentes.
Asimismo, según la Cátedra del Tajo, no se encuentran definidos todos los componentes de los caudales ecológicos en todas las masas de agua y los caudales mínimos fijados son "insuficientes".
"Incertidumbre"
Con todo, ha destacado que el plan establece un programa especial de seguimiento del estado de las masas de agua y de la sostenibilidad de los aprovechamientos en el ámbito del acueducto Tajo-Segura, lo que para la Cátedra es un "elemento de incertidumbre" en la planificación.
De hecho, ha puntualizado que introduce incertidumbre sobre su utilización al no especificar el uso que se le va a dar y que es lo que se va a tener en cuenta en 2028, fecha en la que todas las masas de agua de la cuenca del Tajo deben tener implementados sus caudales ecológicos, "estén o no en buen estado, sin condiciones", y que es el Plan del Segura el que debe coordinarse con el del Tajo.
Además, ha apostillado que las dos disposiciones finales suponen una "novedad" respecto a los documentos previos del plan, de manera que las reglas de explotación del trasvase deberán ser "ajustadas" a las previsiones de los planes hidrológicos del Tajo y del Segura y en 2024 se modificará la Instrucción de Planificación Hidrológica (IPH) en cuanto a los criterios y metodologías para la determinación de los caudales ecológicos.
En este punto, la Cátedra del Tajo ha afirmado que en el caso de las reglas de explotación, si con los cambios se consigue mejorar la situación de los embalses de Entrepeñas y Buendía, y la cuenca del Tajo consigue así disponer del control sobre sus propios recursos, supondrá un "avance".
Y en el caso de la modificación de la IPH, ha apuntado que siempre que se haga para conseguir su objetivo de establecer un régimen de caudales ecológicos que permita mantener de forma sostenible la funcionalidad y estructura de los ecosistemas acuáticos y de los ecosistemas terrestres asociados, "también será bienvenida".
En caso contrario, ha advertido, ambas disposiciones finales supondrán haber "abierto una puerta a futuros empeoramientos".
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