El diestro corta una oreja
El torero toledano Gómez del Pilar y el toro Cartelero llevan la emoción a Las Ventas
Redacción Ahora CLM 
El diestro Gómez del Pilar de Cedillo del Condado (Toledo) cortó la única oreja de la tarde de de la quinta corrida de abono de la Feria de San Isidro 2023. Gómez del Pilar lidió en suerte a ‘Cartelero’ de José Escolar, que fue premiado con la vuelta al ruedo. Una corrida de nota y, sin lugar a dudas, una de las jornadas más interesantes de las que van en San Isidro.
El toledano se encontró con un gran toro de José Escolar al que supo verlo desde su salida de chiqueros. Un ejemplar protestado de salida por parte de un sector del público, pero un toro que no podía fallar por sus hechuras. De hecho, ese animal habría entrado entre los dos nuevos, que no estuvieron reseñados en El Batán.
Noé se dobló con el animal durante las primeras tandas. ‘Cartelero’ fue un torrente de bravura en la muleta del toledano; no en vano se llevó una voltereta por el aire -sin consecuencia alguna- al ser empalado con uno de los pitones del animal.
La faena fue de menos a más bajo la enfermería de Las Ventas donde Noé disfrutó. La espada cayó en buen lugar y la oreja era de ley. La puerta grande estaba al 50% en ese momento. Pero Noé volvió a quedarse a las puertas de ella. Esta vez por la presidencia. Un toro que debió de ser devuelto tras su salida donde apenas se tenía en pie.
Noé lo intentó cuidar y medir en la muleta, pero ni aún así. El toro no tenía nada. Vacío y sin fuerza. Noé abrevió y la puerta grande sigue esperando.
López-Chaves, en su despedida de los ruedos, pisaba por última vez, la plaza de toros de Las Ventas tras 25 años de alternativa. Lo hizo con el peor lote de la tarde. A pesar de ello; estuvo hecho un tío con él. El primero, a punto estuvo de rebañarle con el pitón a la altura de la cara tras ser prendido por el de José Escolar.
‘Pocapena’ se llamaba y el toro hizo honor a su nombre. Complicado y con picante ya de salida; puso complicaciones varias veces durante su lidia con el capote. López-Chaves no quería dejarse nada dentro y más de una vez le echó la pata hacia adelante. Para que pasase por allí y que fuese lo que dios quisiera.
Menos opciones aún tuvo con el cuarto de la tarde. Donde el de astado se durmió en el caballo. Allí en la muleta, el salmantino, poco pudo hacer. Una despedida agridulce para López-Chaves.
Fernando Robleño volvió a dejar una tarde importante pero una vez más, sin espada. Y sin espada no hay paraíso. Siguió la tónica de la corrida goyesca donde también perdió algún apéndice por culpa de los aceros.
Rugió Madrid con Robleño cuando cogió el capote con su primero donde lo lidió a la perfección. El toro tenía chispa, pero le faltaba un poquito de motor; que ya se le puso Robleño. Una faena vibrante, valerosa, aguerrida y de poder. Se basó por el pitón izquierdo del animal. Robleño enlazó varias tandas importantes y meritorias. Sin lugar a dudas de menos a más, donde los tendidos acabaron de pie. Con la espada fue un coladero. Un sinfín de pinchazos.
Al quinto de la tarde le robó embestidas sueltas a otro toro complicado de José Escolar. Robleño acabó viendo tarde las virtudes que tenía el animal por uno de sus pitones. Tan tarde lo vio que el aviso no tardo en sonar por parte de la presidencia. Aún así, dejó alguna tanda importante. No hubo espada de nuevo y el triunfo de esfumó.
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