Tras ser operado mató al quinto y al sexto de la tarde
El toledano Álvaro Alarcón paga con sangre su paso por la Feria de Otoño en Madrid
Alejandro Lara 
Tarde de expectación máxima en el primer festejo programado de la Feria de Otoño 2022 en la plaza de toros de Las Ventas. Novillada de Fuente Ymbro para dos gallos de pelea, que ya sabían, lo que era abrir la puerta grande de Las Ventas: Víctor Hernández y Álvaro Alarcón. Guadalajara y Toledo frente a frente.
El toledano Álvaro Alarcón pagó duro el peaje de la corrida. Quince centímetros provocados por el asta de la res de Fuente Ymbro tuvieron la culpa de ello. Era el segundo de la tarde -primero de su lote- cuando el novillo le pegaba un derrote a la altura del muslo tras sacarse al animal a los medios y propiciar una voltereta.
La cornada, era como el agua, cristalina. El boquete se apreciaba desde el primer momento. Alarcón, que quiere ser torero, esperó a que le hiciesen un torniquete y terminó su faena. Tiro de vergüenza torera.
Y es que, están hechos de otra pasta. Tras despachar al animal con los aceros enfilo el camino de la enfermería tras una sonora ovación y una petición tímida de oreja.
Alarcón pasó a la enfermería a ser operado y en todo momento estuvo dispuesto a salir a los otros dos novillos de su lote. Y así fue. Se corrió turno y el toledano tras ser operado mató el quinto y sexto de la tarde.
A su segundo comenzó a torear en los bajos del 7. Un inicio por estatuarios. Quedándose quieto y en el sitio. Al novillo le faltó chispa y raza, pero Alarcón volvió a dejar su sello presente, en los tendidos. Muy torero y con remates de corte clásico.
Al sexto y último que cerraba la tarde le recibió con la capa en los bajos del 9 y 10 donde se estiró a la verónica. El animal jamás debió de tirar hacia adelante del festejo pero el pañuelo verde nunca asomó desde la presidencia. Alarcón no tenía oponente enfrente y con buen criterio decidió abreviar con el animal y entrar a matar. Finalizado el festejo, volvió a pasar por la enfermería.
La única oreja
Víctor Hernández cortó la única oreja del festejo y, por lo tanto, la primera de esta Feria de Otoño 2022. Fue en el cuarto de la tarde. El novillero de Guadalajara dejó una tarde muy seria y de compromiso donde quizás el premio de una única oreja se queda corto. Y es que, tras su puerta grande en Madrid, se le está mirando con demasiada lupa. Y quizás Hernández debió de abrir la puerta grande en la primera de abono.
La oreja en el cuarto fue premio a la insistencia en una faena seria, digna y cuajada. Una oreja de ley. Toreó desmayado y con un concepto muy suyo. Volvió a poner todo de su parte echándose a torear de rodillas por manoletinas en el final de la faena. Rubricado con una buena estocada.
Con el primero que abría la tarde perdió la oreja con los aceros. Donde el novillo se demoró en caer y se enfrió la cosa. Estuvo voluntarioso desde el primer momento. Dejando buenas tandas que poco a poco fue ligando y haciendo repetir al novillo.
Con el tercer novillo de su lote debió de llegar una nueva oreja en su bagaje personal. Y más cuando la petición era mayoritaria desde el primer momento. Víctor toreó erguido y al natural donde se rompió. Tragó y aguantó los derrotes del animal y dejó una buena estocada. Si ya eso no es de oreja... Quizás, yo no entiendo de esto...
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