Los hechos se remontan a abril de 2018
Piden 7 años de cárcel al sutil atracador de un banco en Toledo
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Toledo acoge este miércoles un juicio contra un hombre acusado de un delito de robo con intimidación en una entidad bancaria en la capital regional.
Los hechos se remontan al 23 de abril de 2018, cuando a las 10:37 horas el acusado se personó en una sucursal de Eurocaja Rural en Toledo y esperó para ser atendido por una de sus empleadas en los mostradores de atención al cliente.
Cuando le llegó su turno, el procesado preguntó a la trabajadora el límite de dinero en metálico que podía dispensarle, a lo que ella contestó que era de 3.000 euros.
Acto seguido, bordeó el mostrador y se colocó al lado de la empleada con una pistola semiautomática y apuntándole con ella le dijo "no le voy a hacer daño, deme 3.000 euros", al tiempo que ocultaba la pistola entre sus ropas a fin de evitar que alguno de los empleados o de los clientes que se encontraban en el interior de la sucursal en ese momento se percataran de lo que estaba ocurriendo.
A causa de la sensación de amedrentamiento y turbación padecida, la trabajadora extrajo del dispensador de dinero en metálico la cantidad exigida por el acusado y se la entregó.
Acto seguido -según recoge el fiscal en su escrito de acusación, consultado por EFE- el atracador le pidió que sacara otros 3.000 euros y la empleada se los entregó, por lo que la entidad reclama la restitución de esos 6.000 euros.
El acusado, que había sido condenado con anterioridad por hechos similares en varias ocasiones, fue detenido el 18 de mayo en un hotel de Getafe (Madrid) donde se alojaba y seguía portando la pistola que exhibió y 13 cartuchos.
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