En estos duros tiempos de pandemia, crisis y vulnerabilidad social, la Iglesia Evangélica Bautista Getsemaní de Talavera también está dando ejemplo de compromiso, solidaridad y empatía con las personas más afectadas por la actual situación, facilitándoles una vez por semana alimentos básicos desde su templo ubicado en el número 1 de la calle Carmen.
Alimentos procedentes del Fondo Europeo de Ayuda a Desfavorecidos, distribuidos a través del Ministerio de Agricultura y Cruz Roja, que hace justo una semana han hecho llegar a esta comunidad religiosa talaverana ocho mil kilos de productos alimenticios para su distribución entre los más necesitados.
Una comunidad que, según traslada a Ahoraclm.com la pastora Eliane Barros, ayuda y atiende actualmente a unas cien familias talaveranas que, cada miércoles de 10,30 a 12 horas, recogen en el templo evangélico los alimentos que necesitan para subsistir de manos de un equipo formado por unos diez voluntarios.
Datos y asesoramiento
Familias que, debido a las auditorías que el banco europeo realiza respecto a la distribución de los alimentos que facilita, tienen que aportar a la comunidad religiosa documentación y datos fehacientes sobre su precariedad social y personal respecto a ingresos, prestaciones sociales y cualquier otro aspecto que afecte a la economía familiar.
Junto a los alimentos, estas familias talaveranas también reciben exhaustiva información sobre las ayudas sociales existentes en la ciudad, con folletos sobre los servicios y recursos sociales a los que pueden acudir para aliviar su acuciante necesidad.
Una necesidad que durante la vigente y latente crisis sanitaria, según confirma la propia Eliane Barros, se ha extendido y generalizado entre la población talaverana sin distinción de procedencias, nacionalidades o religiones.
A todos los necesitados en general, por lo tanto, ayuda y sirve la Iglesia Evangélica Bautista Getsemaní de Talavera impulsada y motivada, según la pastora y psicóloga Eliane Barros, por el firme convencimiento interno de que “servir y proteger a los demás es una herramienta terapéutica y una demostración de empatía con el entorno más próximo”, reforzado en este caso por un profundo sentimiento religioso resumido en la cita bíblica de Marcos 10, 45: “porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos”.