La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha destacado este lunes que la ciudad ha mantenido el pulso “firme y decidido” en el primer año de la legislatura, pese a la crisis sanitaria del coronavirus, y se ha mostrado “orgullosa y agradecida” porque cada concejal “aporta lo mejor de sí y remamos en la misma dirección”.
Este es el balance que ha hecho la regidora municipal en sus redes sociales del primer año desde la toma de posesión tras ganar las elecciones municipales de 2019.
Por su parte, la portavoz del equipo de gobierno, Noelia de la Cruz, ha subrayado en una rueda de prensa que en los últimos doce meses el Gobierno local ha dado “continuidad y coherencia” a la labor emprendida hace cinco años para modernizar la ciudad de la mano de los agentes sociales, el tejido asociativo y todas las asociaciones, entidades y organizaciones.
De la Cruz ha indicado que pese a la crisis de la COVID-19, el Gobierno local ve este momento como “una oportunidad para seguir creciendo, para ampliar la capacidad de gestión y procurar una mayor prosperidad y bienestar a los vecinos”.
Actuaciones
Ha destacado la atención a los más vulnerables desde el área de Servicios Sociales, así como el empleo y la promoción económica y ha recordado que se ha aprobado una ampliación de 200.000 metros cuadrados de suelo industrial en el polígono de Santa María de Benquerencia y una inversión de 1,5 millones de euros para el acondicionamiento de la calle Río Jarama, además de iniciativas como la Escuela de Empleo y el Plan de Reactivación Económica y Social.
Además, la portavoz municipal ha asegurado que se ha aplicado una política fiscal “equilibrada”, que incluye una bajada de impuestos y el aumento de bonificaciones, y ha reivindicado que los ayuntamientos puedan invertir el superávit y el remanente en la recuperación y el bienestar de la ciudadanía.
También ha subrayado que el equipo de Gobierno ha llevado a cabo políticas que han permitido mantener puestos de trabajo públicos y mejorar las condiciones laborales de los empleados municipales, además de continuar en la senda de la modernización de los servicios públicos.
De igual forma, se ha referido al desarrollo urbano con actuaciones que permitirán impulsar el Plan de Ordenación Municipal (POM) y el Plan de Vega Baja y al impulso de la obra pública como uno de los sectores clave para reactivar la economía, así como al fomento de la actividad cultural, la conservación y puesta en valor del patrimonio histórico y monumental, y la renovación e inversión en materia de infraestructuras deportivas.
