El piloto talaverano Álvaro Bautista ha vuelto a pisar el podio 385 días después, desde aquel ya lejano 30 de agosto de 2020 en Motorland.
Una tercera plaza que sabe a victoria porque sólo fue superado por los dos intratables pilotos del mundial, el británico Rea y el turco Razgatlioglu.
Parece increíble que partiendo desde la fila sexta de la parrilla y en la décimo sexta plaza, y en la Superpole Race que se disputa a sólo diez vueltas, el de Talavera de la Reina lograra escalar a ese puesto de honor, y tras el discreto 9º puesto del sábado.
Una bandera roja aliada
Fueron varios los factores para el éxito de Bati en el circuito de Montmeló, ahora llamado ‘Barcelona-Catalunya’.
La principal, un pilotaje agresivo y valiente que le llevó al puesto 12º al terminar el primer giro y al 7º en la tercera vuelta.
Ahí todo se detuvo cuando apareció la bandera roja por la caída de Davies. La Superpole Race se reanudó a sólo cinco vueltas y con las posiciones logradas cuando se decretó la suspensión.
Y llegó la oportunidad que siempre desea Bati: salir delante para poder luchar de tú a tú con los punteros del Campeonato del Mundo de Superbikes.
Tal fue el arrojo que el talaverano alcanzó la segunda posición, disputando el liderato de la carrera al mismísimo Rea.
Con el mundial en juego, ni el irlandés ni el turco estaban dispuestos a permitir que un invitado inesperado se inmiscuyera en su encarnizado duelo, por lo que relegaron a Bautista a la tercera plaza.
Por detrás apretaron Lowes y Rinaldi, el primero aupándose al tercer puesto y el segundo pegado al tubo de escape de la Honda del talaverano.
Parecía que el sueño se esfumaba, pero Álvaro no había dicho la última palabra y tiró de puño y maneta para alcanzar ese tercer puesto que le devuelve a los cajones de honor y que le permitirá salir en la primera línea de la parrilla en la Race 2. Lo contaremos.
