El CD Toledo ha cuajado el mejor partido desde que Diego Merino está al frente de la dirección técnica del primer equipo verde. Y lo ha hecho en el Salto del Caballo ante su propia afición y con un protagonista estelar: Rubén Moreno. El exdelantero de Illescas y Talavera anotó la mitad de los seis goles que encajó el Quintanar del Rey tras exhibir todas sus cualidades anotadoras. Los otros tres tantos los consiguieron Sábate y Álvaro Antón –que recupera su puntería- y un Esparza que cerró la goleada.
Y es que el CD Toledo se encontró con el partido soñado. Su rival, desde el pitido inicial saltó a la presión arriba, con todas las líneas adelantadas y defendiendo en bloque alto. Esta puesta en escena ya hacía presagiar goles y espectáculo y más cuando se comprobó que los locales rompían con suma facilidad la presión y se colocaban con velocidad y excelentes combinaciones en el área conquense.
Únicamente hacía falta abrir la lata y lo hizo Rubén Moreno con su olfato de gol. El mejor futbolista del encuentro se comportó como un auténtico matador y como el estilete que necesita el equipo. El graderío disfrutó, vibró y ya está soñando con el ascenso de categoría, pues no es ninguna quimera, ya que el cuadro capitalino se encuentra a dos partidos para culminar con éxito el objetivo marcado. Ya está aquí el play-off.