Los bomberos continúan retirando la nieve helada de tejados, alares, cubiertas, balcones y demás.
A diario, tanto los bomberos del Ayuntamiento de Toledo como los de CPEIS (Consorcio Provincial de Extinción de Incendios y Salvamentos) de Toledo reciben cientos de llamadas.
Las masas heladas representan un peligro para los transeúntes, ya que al peso de las mismas hay que añadir la inercia en la caída, lo que multiplica su fuerza al impactar.
Estos trabajos en altura se realizan en la cabina de los camiones pluma, sobre los propios techados o con pértigas, palas y mazas.
Simultáneamente se inspeccionan posibles riegos de colapso de las estructuras y las cubiertas.
Debido a la ola de frío que ha llegado tras el paso de la borrasca Filomena, se espera que estas actuaciones se prolonguen durante días.
