El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha destacado que la región está teniendo “una mejoría muy notable tanto de las Urgencias como de los que quedan ingresados en planta”, aunque ha advertido de que el problema que se presenta ahora es la “operación de desenganche” y la “vuelta a la normalidad” en una “fase de convivencia con el virus”.
Así lo ha asegurado en una entrevista en el programa ‘Más vale tarde’ de La Sexta, en la que ha señalado que “una parte muy importante de Castilla-La Mancha vive de manera dinámica en relación con Madrid” y que siendo la capital de España “el foco de irradiación general”, se ha notado en el número de contagios en todo el entorno.
Ha incidido en que ahora también se nota en la aplicación de las medidas de confinamiento que, a su juicio, empiezan a tener “efecto” y ha subrayado que, quitando algunas excepciones, la gente se está portando “divinamente” y que “con todos los espacios hospitalarios en red en la comunidad autónoma estamos dando abasto e, incluso, atendiendo muchos casos que vienen de fuera”.
Operación de desenganche
García-Page ha opinado que el problema que se plantea ahora es la “operación de desenganche, es decir, en qué medida podremos volver a la normalidad sabiendo que habrá una fase de convivencia con el virus”, puesto que “esto no se acaba hasta que haya una vacuna y un tratamiento eficaz”.
Respecto al listado de infraestructuras básicas que ha pedido Pedro Sánchez a los presidentes autonómicos y si tiene que ver con las denominadas ‘arcas de Noé’, donde ubicar a los positivos asintomáticos o con síntomas leves, García-Page ha indicado que el presidente “no hizo un planteamiento cerrado para una finalidad cerrada”.
“Era un planteamiento aproximativo de disponer de locales antes del día 10”, ha aclarado, y de “empezar a estudiar ubicaciones, más pensadas para después que para ahora” y ha añadido que, de cara al día que se levante el estado de alarma y se vuelva al trabajo, “hay que pensar en cómo convivir con el virus y en qué procedimiento se tiene para dar salida a los que pueden tener algún indicio”.
Residencias de mayores
El presidente, que ha reconocido un “desbordamiento general del sistema”, sobre la situación de las residencias de mayores ha agregado que el virus se ha extendido “con una rapidez brutal”, para precisar que “no son hospitales”.
A su juicio, se ha ampliado la esperanza media de vida y en las residencias de mayores hay personas “en situación límite”, que han sido “la diana primera de esta crisis” a la que “en cuestión de horas no ha dado tiempo a responder”.
“Ni tienen la culpa los asistentes ni los directores”, ha proseguido García-Page, quien ha insistido en que la letalidad con la que se ha movido el virus en estos centros ha sido “tremenda” y en que habrá que reflexionar sobre qué cosas mejorar.
Más de 24.000 test
También ha recordado que en la región se han realizado más de 24.000 test en su conjunto, aunque los “concluyentes” son los PCR, y ha detallado que se están aplicando “de manera preferente” a sanitarios y agentes de las fuerzas del orden.
Ha aclarado que quien quiera hablar de éxito en la gestión de una crisis con miles de muertos “se está equivocando”, porque “esto es un fracaso siempre”, y se ha mostrado convencido, para concluir, que “España está respondiendo con mucha fuerza” y que otros países tendrán que hacer una reflexión “mucho más a fondo para ahora y para el futuro”.
