La cadena Burger King ha cerrado sus restaurantes de Talavera y Toledo, como medida de precaución y protección ante el contagio por coronavirus, aunque mantienen el servicio a domicilio y el prestado a través del ‘auto-king’, debiéndose efectuar el pago del pedido únicamente a través de tarjeta de crédito.
Burger King se suma, así, a las últimas recomendaciones del Gobierno para contribuir a evitar la propagación de Covid-19. Esta decisión, manifiestan desde la cadena, “está encaminada a contribuir con el esfuerzo colectivo que toda la sociedad española está realizando en estos difíciles momentos”.
El cierre se mantendrá hasta que la situación de emergencia se dé por finalizada, habiéndose activado un protocolo especial de seguridad para el servicio a domicilio, con el objetivo de garantizar la seguridad de empleados y clientes.
Desde Burger King manifiestan a todo este respecto que “se trata de una medida drástica, pero somos conscientes de que es necesaria para proteger la salud de los clientes y los empleados de los restaurantes, a la vez que contribuye a invitar a la población a que permanezca en casa mientras dure esta situación”.