El presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez, asistió anoche en la Ciudad Imperial a una de las primeras procesiones de la Semana Santa toledana, la procesión del Cristo Nazareno Cautivo de Toledo que salió a las 21 horas de la Catedral Primada para recorrer las calles más céntricas del Casco Histórico.
Junto a la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, y los cerca de 200 miembros de la Cofradía del Cristo Nazareno Cautivo, el presidente de la Diputación seguió el recorrido de la imagen de Jesús por calles tan emblemáticas y llenas de público como Hombre de Palo, Comercio, la plaza de Zocodover, Tornerías o Sixto Ramón Parro, para finalizar de nuevo en la puerta Llana de la Catedral.
La imagen del Cristo Nazareno Cautivo de Toledo es una talla de tamaño natural, obra del imaginero Antonio Martínez, que lleva un hábito de terciopelo blanco y cordón dorado abrazando cuello, cintura y manos.
Cofrades de ambos sexos han portado a hombros al Cristo Nazareno Cautivo cuya figura está iluminada por cuatro faroles de filigrana artesanal que confieren al paso un conjunto de gran belleza.
La sede Canónica de la Cofradía es la parroquia de San José Obrero en el barrio de Santa María de Benquerencia.
Con su participación en la procesión del Cristo Cautivo, que ha sido seguida por un gran número de toledanos y visitantes a lo largo de su recorrido, el presidente de la Diputación de Toledo se une a la celebración de la Semana Santa de Toledo, declarada de Interés Turístico Internacional, mostrando de nuevo su apoyo a uno de los eventos importantes que vive este año 2018 la capital regional.
