jueves, 28 marzo 2024
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Admiten a trámite una queja presentada contra el Ayuntamiento de Pepino

ayto pepino
Ayuntamiento de Pepino.

La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha admitido a trámite una queja basada en la denuncia interpuesta por una trabajadora del servicio de limpieza de las dependencias municipales del Ayuntamiento de Pepino. Esta institución entiende que la queja formulada por María Ángeles Espinosa reúne los requisitos necesarios para iniciar las “actuaciones oportunas” ante el consistorio de la citada localidad.

La acción de la Defensora del Pueblo se ha producido en base a la denuncia materializada a través de la presentación de una demanda por despido improcedente y un recurso de reposición llevado a cabo por la trabajadora. Un recurso que señala múltiples irregularidades en el proceso selectivo, como así se refleja también en la queja a la Defensora del Pueblo. Y que solicita la nulidad de una resolución adoptada por el Ayuntamiento de Pepino en la que procedió a la contratación de tres limpiadoras tras el desarrollo de un examen, en el que fueron excluidas varias aspirantes al puesto. Se da la circunstancia que fueron excluidas las dos aspirantes que hasta ese momento trabajaban justamente como empleadas municipales del servicio de limpieza, entre ellas la denunciante.

A través de la denuncia, se señalan múltiples e importantes irregularidades en el proceso de selección de los tres limpiadoreas realizado por el Ayuntamiento de Pepino, apuntando que el procedimiento seguido “adolece de los mínimos requisitos legalmente establecidos que debe respetar cualquier bolsa de trabajo”.

Asimismo, se denuncia que el “proceso impugnado adolece del mínimo principio de trasparencia para acceder al empleo público”.

Graves irregularidades

Así, señala variadas y graves anomalías en cuestiones básicas. Como en la propia convocatoria de estas ofertas de empleo público o en las bases que las rigen, sin que haya existido publicidad ni de la convocatoria ni de las bases de la misma. Al tratarse de una Administración local, “debió publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia, en el de la comunidad autónoma y, en su caso, en el periódico de la corporación”.

Y también se advierten irregularidades en la forma y desarrollo del examen realizado para decidir la adjudicación de las plazas, matizando que “los aspirantes tuvieron que aprobar un examen cuyo temario no había sido publicado, vulnerando el principio rector del acceso a empleo público”.

Se especifican incluso anomalías en la exclusión de varios aspirantes en el examen, si que “tampoco se publicasen las causas de la exclusión o descalificación de los aspirantes”.

Fraude de ley

Se señala por todo ello que se trata por tanto de “una bolsa que no es sino un fraude de ley dado que sirve única y exclusivamente para que el Ayuntamiento no cumpla con su obligación…”.

Se especifica, además, a través de diferentes fundamentos jurídicos que la resolución impugnada por la que se contrata a los tres trabajadores, es “nula de pleno derecho” en base a varios argumentos de Derecho. Y se cita por ejemplo que se trata de una “oferta de empleo público que no ha sido negociada con los representantes sindicales, y en consecuencia es nula”. Además, de que “no se cumple con los requisitos mínimos que ha de tener toda bolsa de trabajo, ni se cumple la normativa de acceso al empleo público”.

También, se fundamenta a nivel jurídico que la resolución “incurre en vulneración del ordenamiento jurídico vigente”, contraviniendo la normativa en vigor, en diferentes leyes y reales decretos.

La denunciante, viene a indicar en la queja ante la Defensora del Pueblo, que el Ayuntamiento de Pepino viene realizando desde hace tiempo graves irregularidades de este tipo en diferentes procesos selectivos, que han servido incluso para consolidar de forma, presuntamente irregular, el puesto de trabajo de ahora ya varios empleados públicos del Ayuntamiento de Pepino. Asimismo, denuncia actitudes discriminatorias en la adjudicación de algunos puestos, que se destinan de antemano solo para hombres. Y también discriminan a determinadas personas por el simple hecho de no residir en el pueblo de Pepino, favoreciendo a las personas que viven en la localidad.

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