Los cadáveres de dos niños, de 4 y 1 año de edad, y sus padres, todos ellos de nacionalidad brasileña, han sido encontrados descuartizados dentro de varias bolsas de plástico repartidas en el interior de un chalé de la localidad alcarreña de Pioz.
El aviso de un vecino alertando en la noche del sábado del mal olor procedente de la vivienda, situada en la calle Los Sauces de la Urbanización La Arboleda, motivó que el servicio de vigilancia privada de este área residencial pusiera en alerta a la Guardia Civil. Personados en el lugar, los agentes comprobaron que la entrada a la casa no presentaba signos de haber sido forzada, accediendo al interior del chalé a través de una ventana, realizando en el interior el macabro descubrimiento.
Fuentes de la investigación apuntan a que las muertes se pudieron haber producido alrededor del 20 de agosto y obedecer a un posible ajusta de cuentas.
Por su parte, algunos vecinos han explicado que los fallecidos residían en el lugar desde mediados de julio y hacía varias semanas que no tenían noticias de una familia que definen como muy reservada.