El Gobierno regional ha decidido evacuar a los vecinos de la urbanización El Quiñon de Seseña para evitar cualquier tipo de riesgo a la población ante la posibilidad de que la nube de humo producida a raíz del incendio del vertedero de neumáticos.
Según el informe de la Unidad de Análisis y Planificación de Incendios Forestales de Castilla-La Mancha (INFOCAM), de acuerdo con el pronóstico meteorológico a partir de las 21 horas las condiciones de dispersión de la columna de humo son poco favorables, es decir, las condiciones meteorológicas favorecerán la concentración de elementos tóxicos a favor de viento y el riesgo de que llegue a la población.
Esto puede conllevar que exista riesgo para la población, causando irritaciones en los ojos, vías respiratorias e intoxicaciones de diversa índole.
Para hacer frente a esta evacuación el Gobierno de Castilla-La Mancha ha activado el protocolo de actuación en coordinación con la Delegación del Gobierno y con el Ayuntamiento de la localidad a fin de movilizar los recursos necesarios de Guardia Civil y Policía Local, así como voluntarios de Protección Civil y Cruz Roja.
El ochenta por ciento de la población de la urbanización ha abandonado el lugar por sus propios medios, por lo se prevé que se lleve a cabo la evacuación de las cerca de mil personas que aún permanecen en sus viviendas. Se dispondrá de seiscientas plazas de alojamiento, repartidas entre un pabellón polideportivo con capacidad para cien personas en Seseña viejo y dos pabellones de colegios de la localidad de Esquivias, cada uno con 250 plazas.
También el Ejecutivo movilizará cinco ambulancias para la evacuación de personas enfermas, así como una UVI móvil que permanecerá en el lugar, además de duplicar la guardia del equipo sanitario del centro de salud de Esquivias.
