La presencia de los obreros y las vallas en la calle Arco de San Pedro no está impidiendo el ir y venir de gentes de toda edad y condición al encuentro de Jesús de Medinaceli, como cada primer viernes del mes de marzo.
En esta oportunidad, llegar hasta el templo conventual no está exento de obstáculos. Tras la remodelación ejecutada en plaza del Reloj y Corredera del Cristo, el acceso a través de la calle Arco de San Pedro se encuentra actualmente en plena fase de renovación de su calzada y las aceras.
Por fortuna para feligreses y respiro para los comerciantes de Arco de San Pedro, los trabajos ya se encuentran en su recta final. Gracias a ello ha sido posible habilitar una de las aceras para el paso de los viandantes. Además, desde el Ayuntamiento se ha dispuesto un dispositivo especial con la presencia permanente de voluntarios de Protección Civil.