Agentes de Policía Nacional de Ciudad Real lograron detener en plena calle a un agresor sexual que estaba molestando a las transeúntes.
La intervención y llamada de un hombre, que observó los hechos, resultó fundamental para hacer desistir al agresor de su seguir realizando tocamientos y de proferir frases soeces y lascivas hacia las mujeres que pasaban a su lado y, asimismo, permitir la llegada de un coche patrulla que concretó la detención.
Dos mujeres presentaron denuncia por estos hechos que han dado, tras la decisión del juez, con el agresor sexual en la cárcel.