Un hombre y una mujer de nacionalidad china, de 33 y 39 años de edad, respectivamente, y responsables de tres talleres textiles clandestinos, han sido detenidos en la localidad toledana de Sonseca acusados de un delito de trata de seres humanos con fines de explotación laboral y otro contra los derechos de los trabajadores.
En el marco de la ‘Operación Liuxang’, la Guardia Civil practicó cinco registros, tres de ellos en talleres textiles y otros dos en viviendas consideradas como ‘pisos patera’, en los que se ha localizado a 10 personas, también de nacionalidad china, trabajando de forma irregular y en pésimas condiciones de vida.
Los trabajadores llegaban a cumplir habitualmente jornadas laborales de 18 horas en unos talleres que no reunían ningún tipo de condiciones higiénico-sanitarias. Los locales tenían habilitado un sórdido espacio que hacía las veces de cocina, donde se acumulaba la comida sin control sanitario, y otro de comedor donde todos los trabajadores convivían. En el patio de uno de estos talleres se localizó un jabalí muerto tirado en el suelo.
Las diez personas que se encontraban en situación irregular en España han sido puestas a disposición de la Brigada de Extranjería. Además, se ha intervenido numeroso material informático y variada documentación que está siendo analizada.
La operación ha sido llevada a cabo por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Orgaz, en colaboración con el Área de Investigación del Puesto Principal de Mora, ambos pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo y dirigida por el Juzgado de Instrucción de Orgaz.