Luis Miguel Núñez –natural de Candeleda, aunque afincado en Talavera de la Reina- ha decidido sorprendentemente dejar de ser el presidente provincial de Vox. Esta es la segunda maniobra política que Núñez realiza en una espacio corto de tiempo. La primera, fue dejar el número uno de la candidatura a la Alcaldía de Toledo a Alberto Romero para él descender al dos.
Ahora, dimite como presidente provincial porque, según apuntan desde esta formación política, se quiere quedar a un lado y centrarse en la campaña electoral de las municipales. Núñez se marcha de la presidencia con un buen balance, pues cuando él llegó al cargo Vox contaba con trescientos afiliados en la provincia y ahora dispone de 1.300.
Aún no se sabe que presidirá el partido en la provincia toledana, pues se está pensando en constituir una comisión gestora. No obstante, Daniel Arias, el actual vicepresidente, ejercerá como presidente de manera provisional.