Aunque Parrillas se dotó de escudo en los primeros años de la democracia, y pronto se confeccionó el repostero que preside en el Ayuntamiento, va a ser el próximo día 10, festividad parrillana del Santo Cristo del Olvido cuando por fin se inaugure la tan anhelada bandera.
La alcaldesa y su Ayuntamiento han puesto especial interés en ello. De esta manera, cuando algún acto fuera del ayuntamiento o del pueblo lo requiera, podrá ser presidido o acompañado por la bandera, representación del pueblo donde quiera que se encuentre.
Azul y blanco
Ha sido confeccionada con tela azul y blanca, colores tradicionales del Señorío de Oropesa y que coinciden con los de la Virgen parrillana Nuestra Señora de la Luz. Sobre ese fondo blanco y azul campea el escudo, tal y como fue diseñado en su día y ha corroborado la Academia de Vexilología, que en España vigila y certifica la confección de banderas.
Una corona real luce en lo alto del escudo, cuyos emblemas se distribuyen en tres cuarteles. Uno de ellos exhibe el ajedrezado blanco y azur del Señorío de Oropesa. Otro acoge una hoja de parra, aludiendo al origen del nombre del pueblo: Parrillas. Y un tercer cuartel acoge una encina como el elemento natural más abundante y significativo del paisaje parrillano.