Ángel Rodríguez, el propietario de Salones Veracruz, ha anunciado que el espectáculo We Love Perreo: Pornostar no se llevará a efecto en esta sala. Según ha apuntado Rodríguez, él no sabía el contenido de la fiesta, que iba a ser de fin de curso; pero que para darla más promoción, los organizadores del evento diseñaron el cartel de la polémica.
Un cartel que, como se aprecia, aparece en el centro un hombre con el torso desnudo y, a su lado, permanecen dos mujeres con los pechos al aire tapados únicamente por una estrella. Un cartel que tampoco comparte el dueño de la discoteca.
La decisión de la anulación de la fiesta cristaliza después de que el colectivo feminista Toledo Violeta y la Plataforma 8M Toledo exigieran al local que cancelara de manera “inmediata” un evento de temática pornográfica y la publicidad del mismo por “normalizar el abuso hacia las mujeres y tratarlas como carnaza”.
Y es que, para el colectivo feminista, la fiesta trata a las mujeres como “meros objetos sexuales” mediante “denigrantes” actividades “como echar alcohol en el pecho de las bailarinas para que los hombres beban”.
Toledo Violeta se ha mostrado “duramente en contra” de las “erróneas y peligrosas” ideas sobre el sexo que difunde el porno, y advierte de que solamente en el cartel publicitario de la fiesta ya se aprecia que las mujeres aparecen “totalmente sexualizadas”.
Para el colectivo “este tipo de imágenes y de fiestas normalizan las violaciones y la violencia que se encuentran en la industria pornográfica, la cual además está centrada exclusivamente en el placer del hombre y reproduce conductas y relaciones de poder misóginas y pederásticas”.
