Dentro de estas estampas talaveranas -que estos días nos viene haciendo inmortales la cámara de Betis- no podía faltar ese personaje que ha sido el alma y sentir del populoso barrio de la Puerta de Cuartos, esa zona de la ciudad en la que estaba el bar La Solera donde se crió esta estrella de la imagen.
Hoy visita esta sección Lali Torres, uno de los referentes del movimiento vecinal de esta Talavera de nuestros pecados cuando existía movimiento, pues parece que ahora anda algo adormilado. Lali Torres ha sido siempre una luchadora. Perteneció en un tiempo muy lejano al PCE y luego fue evolucionando a posiciones más moderadas sin olvidar su espíritu revolucionario.
Algunos la consideran como una defensora de causas perdidas, pero eso a ella no la importa porque siempre se entrega con corazón, en cuerpo y alma, para conseguir el objetivo marcado. Sigue, aunque sin estar, en la lucha vecinal, se rebela contra las injusticias, quiere acabar con la violencia de género y siempre está dispuesta a prestar su ayuda para lo que se necesite.
La cámara de Betis la ha captado en algo tan peculiar de Puerta de Cuartos como son sus patios y también delante de un galardón que le otorgó la extinta Asociación de Informadores de Talavera (AIT) por su comportamiento con los periodistas talaveranos.
Siempre fue cortés con la prensa, aunque –a veces- se distanció un poco porque estuvo muy cerca de un equipo de gobierno que existió en esta ciudad y ella no entendió las críticas a ese gabinete.