martes, 19 marzo 2024
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Carta abierta al sr. ministro de fomento

Mi muy respetado -aunque no lo merezca- Señor Ministro:

Le remito la presente, en forma abierta, en la seguridad de que no la leerá. Ya sé que no la leerá, pero de esta forma quizá si la lea alguien que sea un poquito más cumplidor que usted. Al menos la leerán muchos, espero, que de tiempo en tiempo tienen el derecho d meter una papeleta en una urna y decidir quién sigue y a quién baja de la dirección del país.

Decía que usted no merecía el respeto que le profeso porque usted ni siquiera se respeta a sí mismo. Quizá no lo recuerde, ya sabemos que a Talavera de la Reina la han clasificado entre las ciudades proscritas, quizá porque hasta no hace mucho vivía por su mano, justo hasta que gracias a usted y otros como usted, ha engordado tanto la Administración y sus dependencias que ya nada se es sin ella. Seguro que ni recuerda ni tampoco le importa que en Talavera haya un enjambre de parados esperando que la Administración levante el veto y pueda ver realizada alguna de esas necesarias infraestructuras que son imprescindibles para subsistir.

El 26 de mayo, el alcalde de Talavera le recordó a Iñigo de la Serna su promesa para con Talavera

Usted nos prometió, ya sé que ni se acuerda ni le importa, estar en Talavera, como muy tarde, a finales de junio para hablar de trenes, de nodos y de otras inversiones hechas en otros lugares hace muchos años. Ya veo que su palabra vale lo mismo que las inversiones que programa para nosotros: nada, nada en absoluto. Y es triste, es triste que con la Ciudad que enseñó al mundo que un apretón de manos era un contrato sagrado, usted tenga un comportamiento tan alejado de la buena crianza, de esa que hace a los hombres hacer honor a su palabra. Porque no es solo que usted no ha cumplido su promesa en cuanto a su tan esperada visita, es que ello significa que nada tiene que ofrecernos y esto es condenar a la más triste de las penurias a una ciudad que, ni por su trayectoria de superación antigua ni por sus valores presentes, lo merece.

Señor ministro: si alguna vez le vuelve la decencia política, recuerde que tiene un compromiso, una deuda con Talavera de la Reina, esa Ciudad que, gracias a usted y otros como usted, pasó de ciudad próspera a manantial de paro. Revise entonces las inversiones que nos negó, nunca será tarde para socorrer a los hambrientos.

Fdo: José Antonio Arbeloa Blasco, presidente de la Federación Empresarial Talaverana (FEPEMTA)

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